El Carisma Fundacional de nuestra comunidad se basa en el seguimiento de Cristo pobre, humilde y crucificado. Ese carisma lo ponemos de manifiesto con nuestra forma de vida de comunidad religiosa de hermanas que rezan, hacen penitencia, viven como menores franciscanas, están siempre dispuestas a ayudar a los necesitados y se integran a la sociedad. Nuestra misión es anunciar la vida evangélica de penitencia a través de la palabra y el ejemplo para guiar a las personas a la renovación interior necesaria.